Decenas de miles de personas marcharon el sábado por el centro de
Moscú en la primera protesta masiva en tres meses contra el presidente
Vladimir Putin, un indicio de que la oposición se mantiene firme pese a
los esfuerzos del Kremlin por sofocar toda disidencia.
La protesta mostró la resistencia del movimiento
disidente, el cual movilizó a más de 100,000 personas hace algunos meses
en una serie de grandes protestas contra la elección de Putin para un
tercer período presidencial.
Las esperanzas de un cambio que alentaban muchos
manifestantes se han extinguido, pero los partidarios de la oposición
parecen dispuestos a seguir la lucha.
0 comentarios:
Publicar un comentario